lunes, 13 de septiembre de 2010

MEMORIAS DE ANTONIO ROMERO, de la transición a los secretos de Estado.


El ex dirigente de Izquierda Unida y del Partido Comunista de España (PCE), Diputado en el Congreso y en el Parlamento Andaluz y además sindicalista Antonio Romero, presentó su libro en la Casa de la Juventud de Castro del Río . “Un jornalero en los secretos del Estado’ Memorias de Antonio Romero, editado por Almuzara, la editorial de Manuel Pimentel, escrito con la colaboración de la periodista Esperanza Peláez.
El acto fue organizado por la Agrupación Local del PCE y especialmente coordinado por Juan Merino, que le acompañó en la organización de las Comisiones Obreras del Campo a mediados de los años setenta. Un jovencísimo entonces Antonio Romero, que destacaba por el aplomo de su oratoria y resolución organizativa.
Siempre se ha dicho que Antonio romero era una delicia para los periodistas, puesto que en cada una de sus intervenciones les regalaba magníficos titulares, con esa capacidad de síntesis que tiene para definir los momentos políticos. Romero es uno de los diputados que ha llevado el cargo público con dedicación y vocación de servicio y además entrando en materias muy sensibles como la corrupción y la guerra sucia. Su libro sobre la corrupción y las mafias de la Costa del Sol son un claro ejemplo de lo que decimos. Claro, que todos los avisos y advertencias sobre lo que ocurría en Marbella y otros puntos de la geografía malagueña no eran escuchados ni atendidos por los que tenían la responsabilidad de vigilar el urbanismo y entonces miraban para otro lado.
Como miembro de la comisión de investigación parlamentaria del caso Roldán o del caso GAL, le costó no ser el Alcalde Málaga, después fue llamado el “Alcalde moral”, pero Felipe González, que decía no conocerlo, se la tenía jurada y lo vetó no sólo para ocupar una Vice-Presidencia en el Congreso sino también para que fuera Alcalde de Málaga y más adelante paró una propuesta de moción de censura contra Celia Villalobos.
Romero cuenta en el libro que tras dejar la escuela con 14 años, comenzó a trabajar de jornalero antes de militante del PCE, sindicalista y parlamentario. En el libro se desvela su actuación en la comisión de investigación parlamentaria del caso Roldán, donde estableció una magnífica relación con miembros de los Servicios Secretos, que le informaba "de todo lo saqueado en la Guardia Civil por Roldán".
PASEO POR LA TRANSICION
En un repaso por la transición recordó el ruido de sables y los errores cometidos como cuando durante la lucha por la reforma agraria, Carrillo lo llamó como secretario general de CCOO del Campo en Andalucía para pedirle que no ocuparan fincas, pues podía ser causa de un golpe de Estado, ya mientras el Sindicato Obrero del Campo (SOC) era minoritario y no inquietaba al poder ni al ejército, ellos tenían presencia en toda la comunidad y podían provocar un golpe. “Nosotros podíamos ocupar ciento cincuenta fincas a la vez en toda Andalucía”.
A cambio de frenar estas luchas nos darían el empleo comunitario y dinero para el PER, si se aplazaba el tema de la Reforma Agraria. “ Nos equivocamos, porque después vendrá el Golpe de Estado y no conseguimos las tierras para cooperativas, como sí las consiguió el Sindicato de Obreros del Campo.
Hoy las tierras están más concentradas que nunca y en menos manos, por lo que el latifundismo no se sólo ha desaparecido, sino que se ha reforzado con subvenciones y ayudas europeas". A una pregunta de los participantes en el acto dijo, que no sólo basta con la reforma agraria, sino que deben intervenir otros factores como la comercialización.
Antonio romero aprovechó la presentación del libro para hablar de temas de actualidad, como la Ley Electoral, pactada entre Alfonso Guerra y Martín Villa, “ para que votasen las hectáreas y no los ciudadanos” o de la Huelga General prevista para el próximo día 29 de septiembre.
Romero, pone todo su esfuerzo y tesón como coordinador de la Red de Municipios por la III República. Confesó que hace cuatro años le detectaron Parkinson, una enfermedad degenerativa que explica que haya decidido escribir sus memorias con 54 años, al desconocer como estará dentro de algunos años. No es la única razón que le llevó a dejar a la esfera política, sino llevar también más de treinta años ocupando cargos públicos. Romero se mostró feliz y muy contento con la vida que le ha tocado vivir . “ Mirando hacía Africa donde las perspectivas de vida no llegan a los 40 años, el vivir algunos años más es un regalo.” Durante una hora Antonio Romero nos hizo recordar, sonreír y sobre todo nos transmitió su mensaje de hombre honesto, sencillo y con profundas raíces en su ideario.

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